Desde que abrimos nuestras puertas, nuestro objetivo ha sido brindar resultados duraderos a nuestros pacientes, reduciendo su necesidad de cirugía, medicación o diagnóstico por imágenes. Para lograr este objetivo, nos centramos en tres cosas: empatía y compasión, excelencia clínica y servicio al cliente.
Esto significa que cada vez que interactúa con nosotros, queremos que tres cosas sean ciertas:
1. Cada persona con la que habla, ya sea que esté programando una cita, recibiendo tratamiento o pagando una factura, lo trata con el mayor respeto y compasión y está dispuesta a hacer un esfuerzo adicional en su nombre.
2. Lo atiende un fisioterapeuta que es un experto en su campo y aprende continuamente nuevas técnicas para ayudarlo a sanar de manera rápida y efectiva, lo que lo convierte en un fisioterapeuta excepcionalmente calificado para tratarlo.
3. Tus amigos y familiares nos recomiendan mucho, y tú también. De hecho, seremos su primera llamada la próxima vez que sienta dolor o dolor.
Sabemos lo que estás pensando: es obvio, ¿verdad? ¿No es eso lo que todo proveedor de atención médica quiere? ¿No es ese el tipo de servicio que debería esperar? Por supuesto que es. Pero, ¿cómo sabes, además de confiar en nuestra palabra, que en realidad estamos alcanzando esas marcas? Hasta ahora no se podía, porque nadie lo había medido antes.
Ergo, nuestro cuadro de mando. Hemos investigado y nos gustaría mostrarle cómo nos comparamos. En los casos en los que podemos compararnos con la comunidad de fisioterapeutas, lo hemos hecho. En otros casos, donde no existen datos de la industria, los puntos de referencia provienen de datos de servicio al cliente universalmente aceptados o de los objetivos (¡extremadamente altos!) que nos hemos fijado.
