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ATM: un verdadero dolor en la mandíbula

¿Tiene dolor en la mandíbula, dolores de cabeza o chasquidos dolorosos al abrir y cerrar la boca? Los dentistas coinciden en que estos tres síntomas son los componentes principales del diagnóstico del trastorno temporomandibular (TMD). Muchos profesionales utilizan habitualmente el término ATM (articulación temporomandibular) cuando hablan de trastornos de la mandíbula. La ATM es el lugar donde la mandíbula (hueso de la mandíbula) se encuentra con el cráneo, lo que permite abrir y cerrar la boca, así como movimientos de lado a lado. Más de 15% de estadounidenses sufren de TMD a diario.

 

Causas: TMD abarca una variedad de afecciones que pueden afectar la articulación temporomandibular, la musculatura de la mandíbula y los nervios faciales y pueden ser muy dolorosas.

 

 

La disfunción puede surgir de:

  • Movimientos repetitivos o sostenidos de la mandíbula, como masticar chicle o apretar los dientes.
  • Trauma en la cara por un accidente automovilístico o un golpe en la mandíbula por actividades recreativas.
  • Movimientos prolongados del cuello posiblemente por dormir en una posición incómoda.
  • Mala alineación de los dientes (maloclusión dental)
  • Postura pobre
  • Estrés

Síntomas:

  • Dolor al abrir/cerrar la mandíbula que puede incluir “chasquidos” o “estallidos”.
  • La mandíbula puede bloquearse en una posición abierta o cerrada.
  • Dolores de cabeza y de oído.
  • Desviación de la mandíbula hacia un lado al abrir
  • Capacidad limitada para abrir la boca.
  • Dificultad para masticar

Tratamiento: Una vez diagnosticado correctamente, es importante comenzar el tratamiento lo antes posible, ya que la ATM es una de las articulaciones más activas del cuerpo. El tratamiento típico comenzaría con el descanso de la articulación, así como con medicamentos recetados o de venta libre para disminuir el dolor y el malestar. El calor y el hielo también pueden resultar beneficiosos. La fisioterapia puede proporcionar tratamientos conservadores dirigidos a minimizar el dolor mediante el aumento del rango de movimiento de las articulaciones, técnicas de relajación muscular, reentrenamiento del músculo que realiza la masticación, reeducación postural y modificación de la actividad. Algunos consejos que pueden ayudar a aliviar el malestar de la mandíbula en ausencia de terapia serían controlar la respiración (inspirar por la nariz y exhalar por la boca) y limitar los movimientos de la mandíbula que provocan dolor, lo que puede significar modificar su dieta a alimentos que sean más fáciles de masticar.

Si tu síntomas no desmayes con estos consejos, llama a uno de nuestros 17 clínicas RET vecinales - Estamos aquí para ayudar.

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